Miguel, hombre de Sarapiquí: No elijo a la persona más bonita del Mundo, elijo a la

No elijo a la persona más bonita del Mundo, elijo a la persona que me haga más bonito mi Mundo. A una mujer hay que tocarle el corazón, no el cuerpo, hay que robarle su atención, no sus sueños, y hay que hacerla reír, no llorar. Ojala todos pensaran y actuaran así. Sin respeto, el amor se pierde. Sin cuidados y detalles, es aburrido. Sin honestidad, es triste. Sin confianza, el amor acaba.