A la hora de tratar de describirme a mi misma me suelo quedar en blanco, hay tantas formas en las que podría empezar. Podría decir mis gustos y demostrar lo variada que soy en ese aspecto (siendo una aficionada a los deportes, películas, libros, videojuegos, anime, manga y novelas ligeras), pero ¿eso sería describirme a mi misma? No, solo es una extensión de mi. Podría confesar que me considero una serie de contradicciones al revelar que soy una persona tranquila pero a su vez amo debatir cualquier tontería, que me gusta salir, viajar y aventurarse a lo desconocido pero también puedo ser absorta por la pereza en un dia lluvioso quedandome en casa con un chocolate caliente y cancelando todo, alguien empática que suele pensar rozando la obsesión sobre el cómo son los demás pero incapaz de entenderse a sí misma, una persona capaz de hablar sin cesar o más silenciosa que una tumba cuando no sabe qué decir, demasiado extrovertida para los introvertidos pero demasiado introvertida para los extrovertidos. Por último podría confesar que sigo en busca de quien soy, siento que nunca nos terminamos de encontrar, la vida me ha enseñado mucho, me ha moldeado y estoy dispuesta a seguir siendo moldeada porque todo es un aprendizaje.
Si me dicen que busco, lo único que quisiera es una
amistad sincera. Alguien que se sienta como y pueda ser el mismo para yo también serlo, alguien con quien hablar y ver películas.
Una persona que tenga gustos particulares, me encanta aprender nuevas cosas
