Gustavo, hombre de Conocoto: Conmigo no hace falta que te escondas las arrugas, ni

Conmigo no hace falta que te escondas las arrugas, ni que te cubras esos gorditos de más, no necesitas corregir imperfeccion alguna, se te ama como es. Conmigo no es necesario que seas virgen, ni indespensable que no sepas amar. Yo te voy a enseñar bonito a que nos amemos, a que conozcas el amor. Sabrás lo que se siente que te regalen flores, y te lleven serenata, y lo que son las cartas de amor, verás plasmado lo que siento por ti en ellas y mis palabras no se las llevará el viento. Porque te amo y quiero tenerte cerca de mí, no una noche ni un día, sino toda la vida.